viernes, 16 de noviembre de 2012

VALORES MORALES


DEFINICIÓN:
Los valores Morales son todas aquellas cuestiones que llevan al hombre a defender y crecer en su dignidad en cuanto persona, porque indefectiblemente el valor moral conducirá al hombre hacia el bien moral, que como sabemos, es aquello que lo perfecciona, lo completa y mejora. Los valores morales siempre perfeccionarán al hombre en cuanto ser hombre, las acciones buenas, como ser vivir honestamente, decir la verdad y actuar siempre pensando en el prójimo, jamás podrán contradecir el camino hacia la perfección. En tanto, la elección por los valores morales es una decisión absolutamente libre y no impuesta que tiene cada hombre, es decir, este decidirá si opta por ellos o no, pero sin dudas, el hecho de elegirlos a estos tendrá el directo efecto de hacerlo más humano y de otorgarle una calidad extra como persona.


IMPORTANCIA DE LOS VALORES MORALES

De poco nos sirve tener muy buena salud, ser muy creyente o muy inteligente o vivir rodeado de comodidades y lujos si no se es justo, bueno, o si no hacemos el bien, por lo tanto el valor es captado como el bien, ya que se le identifica con lo bueno, con lo perfecto o con lo valioso, pero hay cosas negativas que para algunos tienen valor y significado, convirtiéndolos así en malas personas, elementos dañinos a la armonía de la sociedad, con quién la convivencia es muy difícil; entonces el mal lo vemos como la carencia y ausencia de bien. Es por eso que los valores hoy en día se han ido perdiendo y como consecuencia tenemos a personas con una laxa, distorsionada o nula introyección de la escala de valores y normas, estas personas se dice que actúan de acuerdo a los anti valores.

TIPOS DE VALORES MORALES

En base a las múltiples acepciones reconocidas de manera oficial para el concepto de valor (término de origen latino que puede hacer referencia a un costo, a la osadía de alguien o a una situación de equivalencia entre dos o más objetos, entre otros significados), es posible hallar diversas clases de valores. Uno de ellos es el de carácter moral, un conjunto que engloba a cualidades propias del ser humano que lo enriquecen como individuo y le permiten ser una persona de bien.

La lealtad, la honestidad, el sentido de solidaridad y el respeto son algunos valores morales que pueden desarrollarse desde la infancia y que convierten a quien los cultiva y los enseña en una especie de modelo o ejemplo a seguir. Los valores morales bien podrían ser definidos como universales porque pueden ser adquiridos y ejercidos sin limitaciones ni restricciones por toda la humanidad, pero existen criterios que permiten presentarlos con mayor precisión de acuerdo a cómo llegan a la vida de uno y el contexto en el cual se estiman. Así, pues, podríamos establecer que hay valores morales de raíz familiar (adquiridos en el núcleo de la familia y transmitidos de acuerdo a las creencias de los mayores), otros más personales (conocidos en el seno familiar pero adquiridos por un individuo en particular de acuerdo a sus propias consideraciones y elecciones) y hasta hay valores vinculados a la moral con relevancia socio-cultural (ya que están condicionados por hábitos culturales y pueden variar de acuerdo a tradiciones y pensamientos sociales).

CLASES DE VALORES MORALES

Respeto: Es apreciar y valorar las cualidades de los demás, tomando en cuenta que tiene derechos.


Fidelidad: Es cumplir un compromiso que implica cariño a cualquier actividad, idea o persona.


Responsabilidad: Asumir las consecuencias de tus actos o palabras.


Puntualidad: Hacer las cosas a su debido tiempo.


Tolerancia: Saber respetar a las demás personas en su entorno.


Honestidad:  Es la congruencia entre lo que se piensa y como se actúa.


Caridad:  El ayudar desinteresadamente a los demás, y la prestación de auxilios a quien lo necesita.


Lealtad:  Es la cualidad de las personas que tienen para cumplir acuerdos. Parecido a la fidelidad.

Humildad:  Es considerarse pequeño con respecto a lo que es trascendente o con respecto a Dios (si es creyente).

Solidaridad:  Dar apoyo moral o económico a quien lo necesita.

Generosidad:  Dar y entender a los demás, sin esperar recibir a cambio.

Paz: Un estado de tranquilidad.

Sinceridad:  Decir la verdad, y procurar que nuestra forma de actuar sea la misma en todas las ocasiones y con todas las personas.

Coherencia:  Mostrar que somos personas de una sola pieza, siempre actuando con respecto a nuestras ideas y principios.


Integridad:  Vida en concordancia con nuestro estado de conciencia más elevado.

Lealtad: La lealtad es un corresponder, una obligación que se tiene con los demás. Es un compromiso a defender lo que creemos y en quien creemos.


Constancia :  Firmeza y perseverancia en las resoluciones, en los propósitos o en las acciones.


Devoción: Es la disposición de la voluntad para cumplir con prontitud lo propio de una relación. Por ejemplo, un hombre devoto a su esposa.


Fidelidad:  (persona fiel) Se refiere a la persona cuyas acciones no traicionan la confianza puesta en ella, esto es, cuyo comportamiento corresponde a lo que exige de ella el amor, la amistad, el deber, etc.